Ana Wagener, Omar Banana, Alba Flores, Carmen Orellana, La Dani, Lola Buzón, Alex De la Croix, Jesús Carroza, Mari Paz Sayago y Manuel Morón participan en esta película enmarcada en el movimiento LGTBI andaluz de 1977. 

Sevilla, 1977. Reme está orgullosa de que su hijo Miguel vaya a convertirse en el primer universitario de la familia. Aunque lo que de verdad quiere Miguel, es ser artista y cantar en un popular concurso de televisión. En un momento en que en España la homosexualidad es delito, Reme descubrirá también quienes son los nuevos amigos de su hijo: el incipiente movimiento LGTBI andaluz, gestado paradójicamente en el seno de la Iglesia.

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En su última obra cinematográfica, el director Alejandro Marín nos invita a embarcarnos en un viaje en el tiempo hasta la Sevilla del año 1977. A través de su lente, nos presenta la conmovedora historia de Miguel, un joven de diecisiete años cuyo destino parece estar escrito por las expectativas sociales y familiares de convertirse en abogado, pero que decide desafiar todos los pronósticos en busca de su verdadero sueño: convertirse en artista y participar en un programa de la época llamado "Gente Joven".

La trama se va desplegando en una vibrante lucha de Miguel por alcanzar sus metas personales y artísticas. En este camino, Miguel encuentra un grupo de aliados inesperados: un círculo de individuos del colectivo LGTBI que no solo le ayudan a perseguir su sueño, sino que juntos, alcanzan logros colectivos que dejan una huella imborrable en la sociedad.

La película de Marín no solo se distingue por su excepcional dirección y guion, sino también por su valentía al abordar un tema de relevancia histórica y social que sigue siendo relevante hoy en día. En el núcleo de la trama, se encuentra la lucha por derogar la "Ley de Peligrosidad Social" de aquel tiempo, una ley que, entre otras injusticias, prohibía y condenaba la homosexualidad. La película realiza un retrato fiel y emotivo de la lucha que muchas personas llevaron a cabo para derogar esta ley y ganar el derecho a vivir su vida y su sexualidad como ellos decidieran.

En cuanto a las actuaciones, es imprescindible destacar el trabajo de Alba Flores y Ana Wagener, quien interpreta a la madre del protagonista. Ambas ofrecen una interpretación magistral que le da vida y autenticidad a la historia. De igual manera, la intervención de Jesús Carroza, en el papel de un cura amigo de la familia, es notable y aporta una interesante perspectiva, ya que se evidencia cómo el movimiento LGTBI en Sevilla se gestó, al menos en parte, dentro de la iglesia.

La película de Alejandro Marín es una pieza cinematográfica muy bien elaborada que, sin evitar temas difíciles o tabúes, retrata fielmente lo que se vivió durante esos años. Destaca en particular la lucha del "Movimiento Homosexual de Acción Revolucionaria", presentando a aquellas valientes personas pioneras en la lucha por los derechos del colectivo LGTBI en España, que lograron avances significativos y terminaron con la persecución de la homosexualidad. Sin duda alguna, es una pieza de arte que invita a la reflexión y al reconocimiento de aquellos que se atrevieron a luchar por su libertad.

Por Pablo Fernández