No Me Toques El Cuento

18.05.2023

¡ESTAMOS HARTAS DE NUESTRA CONDICIÓN DE PRINCESAS, DE PERFECTAS, DE FELICES PARA SIEMPRE!

Tras agotar entradas durante dos temporadas en Teatros Luchana, y girar en toda España, dan el salto al Pavón las princesas inconformistas.

No me toques el cuento nos muestra cómo cuatro princesas se rebelan y exigen contar la otra cara del cuento. Eso que no se cuenta porque, al fin y al cabo, no es tan bonito como dicen…

SINOPSIS

Todos conocemos a las princesas Disney. Siempre bellas, alegres, bondadosas.
Y, por supuesto… Todas saben cantar.
Pero, ¿Conocemos la vida de esas princesas? ¿Sabemos lo que supuso para ellas su propio cuento de hadas? ¿Qué fue de ellas?

El otro lado del "y vivieron felices y comieron perdices".

No me toques el cuento nos muestra cómo cuatro princesas se rebelan y exigen contar la otra cara del cuento. Eso que no se cuenta porque, al fin y al cabo, no es tan bonito como dicen…'


¿QUE OPINAMOS?



"No Me Toques el Cuento" es una pieza teatral inigualable que brota de la incansable creatividad de Olivia Lara, quien brilla en un triple papel como autora, directora y actriz principal. A su lado, destacan las prodigiosas Masi Rodríguez, Carmen Calle e Isabel Morán, que juntas han creado una producción tan absorbente que ha agotado entradas en repetidas ocasiones, un testamento a su resonancia con el público.

El enfoque de la obra es revolucionario, al redefinir a cuatro icónicas princesas Disney -Bella, Blancanieves, Cenicienta y Aurora- y darles voz para transmitir un mensaje poderoso y vital. Este mensaje surge de las complejidades y las verdades desconocidas de sus respectivas historias, desafiando la visión normalizada y edulcorada de las princesas que hemos absorbido durante años. La escenografía, repleta de elementos sacados directamente de los cuentos de hadas, complementa perfectamente este tema. Los rosas, azules y amarillos tradicionalmente infantiles y las peculiares parafernalias de pócimas que resultan ser bebidas alcohólicas, son recursos magistrales para evidenciar la dicotomía entre el ideal y la realidad.

En el corazón de la obra radica un núcleo dramático impactante y audaz: las mujeres, que han sido obligadas a la sumisión y a vivir vidas que no eligieron, deciden rebelarse contra la injusticia. Los personajes adquieren una nueva dimensión, exagerando ciertos rasgos, como las luchas con enfermedades mentales y el alcoholismo, que se presentan como subproductos de las opresivas circunstancias en las que han vivido. Las narrativas a menudo mal interpretadas de la bipolaridad, el síndrome de Estocolmo y la narcolepsia están presentes y sirven como una metáfora poderosa de la mujer moderna, a menudo mal entendida y etiquetada erróneamente cuando se sale de las convenciones sociales restrictivas.

Lo notable de esta obra es su capacidad para presentar temas difíciles con un toque de comicidad y cotidianidad. Las bromas escatológicas y sexuales se entretejen con gracia en el tejido de la obra, proporcionando un alivio cómico que la equilibra. Además, cada princesa está asociada con un estilo musical particular, que utilizan para entrelazar momentos de humor con sus deseos latentes de libertad.

Hablar de las actuaciones individuales en "No Me Toques el Cuento" es adentrarse en un terreno de talento y dedicación. Carmen Calle irrumpe en escena con una personalidad que se roba el espectáculo, su expresividad corporal y gestualidad transmiten su personaje de manera brillante. Por su parte, Masi Rodríguez entrega una actuación notable con momentos de auténtica brillantez cómica, aportando una naturalidad bien gestionada que se funde perfectamente con la personalidad de la obra.

Isabel Morán aborda con destreza un papel que puede parecer simple a primera vista, pero que esconde una profunda complejidad. Su personaje, basado en la imagen estereotipada de las "chonis" de barrio, es traído a la vida con una veracidad convincente. Y finalmente, Olivia Lara, interpreta a una Bella en crisis, que se enfrenta a una relación tóxica con Bestia y lucha contra su dependencia del alcohol. Su personaje, a pesar de sus luchas, resulta ser tan atractivo que ansiamos verla en escena todo el tiempo.

En conclusión, a pesar de mi deseo personal de escuchar más de las voces extraordinarias de estas cuatro actrices en un mayor número de canciones, "No Me Toques el Cuento" es una obra magnífica. Es una fusión armoniosa de drama, comedia y música que cuestiona los convencionalismos, ofrece un comentario social crítico y al mismo tiempo proporciona un entretenimiento inigualable. Es, sin lugar a dudas, una experiencia teatral que no debería perderse.

Por: @manugcarrasco