El Último Verso

El asesinato de Lorca. Solo las tierras de Granada saben lo que ocurrió.


Madrid acoge El Último Verso, la aclamada obra de Timaginas Teatro que revive, entre intriga y poesía, los últimos días de Federico García Lorca, con una puesta en escena y un elenco que dejan sin aliento.


El Último Verso, la joya de la corona de Timaginas Teatro, aterriza en Madrid con una de las teorías más recientes sobre el asesinato de Federico García Lorca. Tras una profunda labor de documentación, Raquel Trujillo crea una ficción teatral que, bajo la excelente dirección de María Rodríguez y con la emocionante banda sonora de Jesús Martín Fernández, resucita a Lorca para contarnos su historia.

Aunque es una ficción, las piezas encajan de manera inquietantemente precisa. Tras la publicación de la obra cumbre del poeta, La casa de Bernarda Alba, surgen sospechas entre una de las grandes familias de Granada, los Roldán, quienes tienen parentesco por matrimonio con la Casa de los Alba. Horacio, el primogénito de los Roldán, comienza a creer que la obra está basada en la familia de su esposa y desata un torbellino dentro del clan. Con la Guerra Civil como telón de fondo, El Último Verso despliega un drama donde todo se descontrola de forma apocalíptica, arrastrado por la venganza, los traumas familiares y los horrores de un conflicto que fragmentó a la sociedad.

La interpretación del elenco es soberbia, con un destacado protagonismo de Armando Jerez, quien da vida al atormentado Horacio, y Alejandro Fuertes, quien encarna a Lorca. Fuertes logra transmitir la dualidad de un ser humano valiente al expresarse a través de sus obras, pero frágil ante la barbarie.

Aunque destacamos la brillantez de los protagonistas, cabe señalar que los catorce integrantes del elenco ofrecen un trabajo excepcional, envolviendo la historia de emociones contrapuestas: ternura, cariño, miedo, tensión y antipatía. En definitiva, es una obra que conmueve el alma y no deja indiferente a quien la presencia en el teatro.

La escenografía y el vestuario merecen una mención especial. De estilo costumbrista, transportan al espectador directamente a la Granada de principios del siglo XX. La atmósfera austera, con bombillas suspendidas en techos altos que evocan el inicio de esa turbulenta época, crea un marco perfecto para la historia. Los personajes, vestidos por Carmensa Rodríguez, están llenos de vida y realismo, no solo por la indumentaria, sino también por las anatomías que se recrean bajo los trajes: ancianos, embarazadas, jóvenes. Este detalle proporciona un plus a los actores, ayudándolos a integrarse plenamente en sus papeles.


El Último Verso es una obra creada para la eternidad, con un guion y una puesta en escena excepcionales. Tras su éxito esta temporada, la producción encara sus dos últimas funciones antes de Navidad (13 y 20 de diciembre). Esperamos que continúe llenando teatros cada vez más grandes.


Por Marta Martínez.