Anticristo (2009)

31.03.2024

"Anticristo" es una película del año 2009 dirigida por Lars von Trier, descubierta hace aproximadamente un año y medio gracias a mi amiga cinéfila de confianza, Mery. Sin duda, me sorprendió por muchos motivos; era un tipo de cine que desconocía pero que merece la pena explorar, a pesar de lo turbio y extraño que puede ser. Lars tiene una forma muy particular de contar historias, y las que refleja en sus obras son igualmente singulares, aunque a veces demasiado particulares para mi gusto. Tras ver "Rompiendo las olas" y "Dogville", decidí no volver a ver más películas de este director debido al impacto que me causaron, aunque debo admitir que hubo otras obras suyas que me gustaron y que no me dejaron la misma sensación desagradable, como "Bailar en la oscuridad" o "Nymphomaniac. Volumen 1", una de mis favoritas.

Sin embargo, rompí mi promesa y decidí ver "Anticristo". La película narra la historia de una pareja que, tras perder trágicamente a su único hijo, cae en una profunda tristeza y decide trasladarse a una pequeña cabaña en medio de un bosque para intentar superarlo. El marido (interpretado por Willem Dafoe), que es psicólogo, intenta terapias poco convencionales con su esposa (Charlotte Gainsbourg) para que enfrente su dolor y miedos de manera cruda, pero nada sale como esperaban. La película está dividida en capítulos: el prólogo, seguido por los capítulos "Tristeza", "Dolor" (donde reina el caos), "Desesperanza" (que aborda el genocidio), "Los tres mendigos" y, finalmente, el epílogo.

"Anticristo" es un viaje hacia el lado oscuro del ser humano, tratando temas como la depresión y la ansiedad de manera cruda y explícita. Algunas escenas reflejan perfectamente los ataques de ansiedad, llegando a impactar al espectador por lo realistas que son. Destaco la extraordinaria actuación de Charlotte Gainsbourg, que ya había impresionado en "Nymphomaniac". Su interpretación en ambas películas es sublime, especialmente considerando la complejidad de los personajes. Willem Dafoe también realiza una excelente interpretación.

Hasta con la crudeza de algunas escenas, que incluyen mutilaciones y elementos que rozan la misoginia, la película es muy recomendable, con un trasfondo mucho más profundo de lo que podría parecer inicialmente. Aborda referencias bíblicas y temas de brujería, especialmente en el extraño final, donde las mujeres asesinadas en el pasado son liberadas y suben a la cumbre del bosque. También es interesante la simbología de los tres mendigos, que representan la tristeza, el dolor y la desesperanza, y cuya presencia en la película marca un deterioro progresivo de la situación. Además, Lars von Trier presenta una visión inversa de la historia del Anticristo, comenzando con su muerte en lugar de su nacimiento, lo que añade un componente religioso intrigante a la trama.

A pesar de la melancolía y la tristeza que caracterizan la película, que son marcas distintivas de la filmografía de Lars von Trier y que en algún momento me hicieron alejarme de su cine, sigue siendo válido adentrarse de vez en cuando en este tipo de experiencias cinematográficas tan alejadas de lo habitual.


Por Pablo Fernández.